¿Cómo cuidar un gato cachorro? Una de las cosas más importante si tienes planes de tener a un felino con poco tiempo de nacido.
Llevar a casa una linda y tierna bola de pelo puede ser emocionante, pero mantenerlo feliz y seguro requerirá un esfuerzo en equipo de toda la familia. Tu gatito dependerá por completo de ti durante la transición a su nuevo lugar desconocido.
A diferencia de los gatos adultos, los gatos cachorros requieren mucho más cuidado y supervisión debido a su naturaleza curiosa y activa. Aquí hay varios consejos sobre cómo cuidar a un gatito y facilitar la llegada del nuevo integrante de tu familia.
Cómo cuidar a un gato rescatado de la calle
Un gato recién nacido debería permanecer con su madre durante las primeras 8 semanas de vida. Separarlo antes podría perjudicar su salud y su socialización.
Si has rescatado a un gato cachorro, lo primero que deberías hacer es llevarlo al veterinario. Los gatos recién nacidos reciben a través de la leche materna el calostro, una sustancia que les brinda defensas en el sistema inmunológico. A falta de estas defensas, el gato podría sufrir de parásitos o cualquier otra enfermedad.
Una vez que hayas garantizado que tu gato se encuentra bien de salud, es momento de preparar su lugar. Te recomendamos crear un entorno estable y confortable. Para ello, puedes usar un transportín o una cesta, añade mantitas y toallas para que el pequeño gato se sienta cómodo. Asegúrate mantener su temperatura corporal entre 20 y 22 ºC, ya que en esta etapa los gatitos no son capaces de regularse la temperatura a sí mismos. De lo contrario, podrían resfriarse con facilidad. Para mantener esta temperatura, puedes colocar una esterilla eléctrica por debajo del nido, siempre cubierta con toallas para que no entre en contacto con ella y evitar accidentes indeseados. Aliméntalo con leche artificial maternizada, siguiendo las instrucciones que te ofrecemos a continuación.
Cómo alimentar a un gato recién nacido con biberón
La alimentación de tu pequeño es uno de los aspectos fundamentales si deseas aprender cómo cuidar un gato cachorro. Darle de comer con biberón se realiza para mejorar la nutrición, especialmente si el gatito está en malas condiciones o si la madre ya no está presente. Por lo general, la alimentación con biberón es necesaria con gatos pequeños que han pasado por un trauma nutricional. Tu veterinario puede ayudarte a determinar qué se necesita en el caso particular de tu mascota.
Para el cuidado de gatitos recién nacidos, necesitará un reemplazo de leche materna en polvo para gatos. Algunas de las marcas recomendadas son Forcemilk, o PetAg KMR que puedes encontrar en Amazon, o bien en tiendas de mascotas. Adicionalmente, un biberón especializado te ayudará a alimentar a tu gatito con el sustituto de la leche.
Los kits de biberones diseñados para alimentar a los gatitos están disponibles en la mayoría de las tiendas de artículos para mascotas. Las instrucciones sobre cómo preparar los biberones generalmente se proporcionan en cada producto. Las aberturas de los pezones no deben ser demasiado grandes o anchas y deberás esterilizar los biberones de tu gatito entre las comidas.
Un gato bebé debe comer alrededor de 8 mililitros de fórmula por onza de peso corporal por día. En caso de no estar seguro de cuántas onzas darle de comer, es mejor que vayas por debajo. Siempre será mejor opción darle poca comida a tu gato cachorro y darle más si te la pide, en lugar de alimentarlo en exceso. También es más seguro dar porciones pequeñas más frecuentemente, que pocas porciones grandes. La sobrealimentación podría provocar cólicos e hinchazón a tu mascota.
Utiliza la siguiente tabla como referencia general para alimentar a tu gatito:
Temperatura del biberón y postura para alimentarlo
Es posible que tengas que calentar la fórmula colocándola en un recipiente con agua caliente. En el caso de la fórmula de la marca KMR debe calentarse a temperatura media baja. Siempre prueba la temperatura en tu muñeca antes de dársela a tu gatito. También puedes usar un termómetro de cocina para asegurarte de que la temperatura de la leche es la adecuada y perfecta para tu gato.
Al momento de alimentarlo, una excelente opción es sentarse con una toalla en tu regazo con el gatito frente a ti. Nunca lo alimentes boca arriba. Siempre debe estar boca abajo en una posición similar a la que se colocaría junto a su madre para ser amamantado. Empieza por dar la vuelta al biberón y deja que salga una gota del alimento.
Coloque la tetina del biberón en la boca del gatito mientras lo mueve suavemente hacia adelante y hacia atrás, sosteniendo el biberón en un ángulo de 45 grados para evitar que el aire entre en el estómago del gato. Este proceso debería animar al bebé a empezar a comer. Si no es así, intenta frotar la cabeza del gato para imitar los lamidos de su madre.
Los gatitos recién nacidos, hasta 1 semana de edad, deben ser alimentados cada 2 a 3 horas y a las 2 semanas, cada 4-6 horas. Una vez que tengan 3 semanas, se les puede dar de comer cada 4 a 6 horas.
Continúa usando la regla de 8 mililitros de fórmula por onza de peso corporal por día, como hemos descrito anteriormente, para determinar la cantidad de alimento que el gatito debe ingerir. Siempre límpiale cara y lávate las manos cuando hayas terminado de alimentarlo.
Después de la alimentación con biberón o de amamantar, es probable que la mayoría de los gatos bebés quieran dormir, pero antes necesitan que los hagan eructar, al igual que los bebés humanos. Acuesta al gatito sobre su estómago, usando tu hombro o regazo, y acaricia suavemente su espalda hasta que escuches un pequeño eructo. Es posible que debas hacer eructar a tu gatito bebé un par de veces por cada vez que lo alimentes.
Ayuda a tu gatito a ir al baño
Las gatas madre estimulan a los gatitos para que vayan al baño lamiéndolos. Si la madre todavía está cerca, permítele hacer su trabajo lamiéndolo para estimularlo a ir. Si estás cuidando a un gatito huérfano, deberás ayudarlo estimulándolo tras cada alimentación.
Usa un paño suave y desechable como papel higiénico, o trapos húmedos o secos, mientras sostienes al gato firmemente con una mano. Luego frota suavemente el área genital con movimientos circulares. El gatito debe comenzar a orinar y debes seguir frotando hasta que termine. Este proceso también se puede utilizar cerca del área inferior si el gatito necesita hacer caca.
Cómo quitarle el biberón a un gatito
Esta es una de las etapas más importantes si quieres saber cómo cuidar a un gato cachorro. Normalmente los gatitos comienzan con sólidos a las 7 u 8 semanas, pero el proceso de destete suele comenzar durante la semana 4. Intenta ofrecer a los gatitos fórmula en una cuchara y una vez que la estén lamiendo, intenta poner un poco de fórmula en un plato pequeño. También puedes intentar darle comida húmeda y sólida para gatos en la fórmula que le pongas en el plato. Durante este tiempo, aún necesitarás alimentarlo con biberón.
A medida que tu gato se acostumbre a comer alimentos húmedos, también podrás agregar más agua a la fórmula. Conforme vaya comiendo más comida sólida y menos fórmula, necesitarás tener un recipiente con agua fresca disponible en todo momento para mantenerlo bien hidratado.
Durante este tiempo, también puedes agregar un alimento seco para gatitos a su dieta. Presta atención a sus heces para asegurarte de que toleran bien la nueva comida. Si la diarrea o el estreñimiento se convierten en un problema con el cambio en la dieta, comunícate con su veterinario.
Cuidar a un gatito recién nacido es divertido y emocionante, pero el cuidado adecuado es vital para la salud y el desarrollo de tu gato durante su etapa de cachorro. Controla el peso a tu gato bebé y asegúrate de que esté ganando de 7 a 15 gramos por día. Si tienes alguna inquietud sobre la salud de tu gato, es importante que te comuniques con un veterinario de inmediato.
Cosas que comprar para un gato bebé
Existen algunos artículos imprescindibles que debes comprar si decides tener a un gato bebé en casa, y otros más para cuando vaya creciendo. Recuerda que tu objetivo principal es el de ser el mejor en el proceso de cómo cuidar un gato cachorro. Te recomendamos los siguientes:
- Leche maternizada en polvo.
- Biberón para alimentarlo.
- Comedero y fuente de agua.
- Una caja de arena.
- Collar.
- Muchos juguetes pequeños seguros y un árbol para gatos para promover el ejercicio.
- Cama forrada con mantas calientes.
- Artículos de aseo como un cepillo y un cortaúñas.
- Transportín para gatos.
- Etiqueta de identificación o microchip implantado para garantizar que tu gato no se pierda.
Elige un veterinario para tu gato
Lo primero que debes hacer es permitir que un veterinario examine a tu gatito bebé para asegurarte de que no haya problemas de salud. Los parásitos intestinales son muy comunes en los gatos recién nacidos y se determinan mediante exámenes fecales. Los tratamientos se administran y repiten hasta que dos exámenes fecales consecutivos sean negativos.
Los parásitos externos, como pulgas, garrapatas y ácaros, se tratan con remedios seguros para gatos.
Los gatitos reciben algo de inmunidad de sus madres al nacer y durante la lactancia, pero esta inmunidad desaparece lentamente. Por lo tanto, a las ocho semanas tu gatito debe estar vacunado y listo para ser esterilizado o castrado. También es una buena idea que le hagas un microchip a tu gatito.
Proporcionar alimentos para gatos de alta calidad
La dieta de tu gatito debe provenir de alimentos secos y húmedos de alta calidad que estén llenos de proteínas y aminoácidos esenciales para brindar apoyo nutricional. De seis a siete semanas de edad, los gatitos deben poder masticar alimentos secos. Dado que los gatos cachorros no se comen toda su comida de una sola vez, esta se puede dejar fuera y servida en su comedero. Habla con su veterinario para determinar el tipo de alimento adecuado para tu gatito.
No le des leche a tu gato porque puede causar problemas digestivos. Adicionalmente, no se le deben dar sobras de la mesa por razones de salud, además se puede malacostumbrar y puede que luego rechace la comida para gatos que le pongas.
Clave para aprender cómo cuidar un gato cachorro: mantenerlo hidratado
Asegúrate de que tu gatito disponga de agua limpia y fresca en todo momento. El tazón debe ser lo suficientemente bajo para que el gato pueda beber de él fácilmente. Debido a que a los gatitos a veces les gusta jugar en el agua, es posible que se requiera un recipiente pesado para evitar que se vuelquen.
Designa una habitación para tu gatito
Lo recomendable es asignar una habitación aislada, lejos de otros animales, para que el gatito se adapte a su nuevo hogar. Esta habitación debe tener una puerta, caja de arena, tazones de agua y comida, juguetes y ropa de cama abrigada.
Si tu gatito tiene problemas para dormir, trata de envolver un reloj que haga tictac en una manta cerca de su cama para recordarle los latidos del corazón de su madre. Asegúrate de que tu gatito tenga muchas mantas en su cama porque sus cuerpos son demasiado pequeños para retener bien el calor corporal. Coloca siempre la caja de arena lo más lejos posible de la comida del porque, al igual que los humanos, no querrá comer cerca de su sitio de aseo.
Establece una rutina de alimentación para tu gato
Dependiendo de la edad, los gatos deben ser alimentados entre 2 y 4 veces al día. En términos generales, si tu gatito tiene entre tres y seis meses, puedes alimentarlo tres veces al día y, una vez que cumpla los seis meses, puedes alimentarlo dos veces al día. Es esencial que controles los hábitos alimenticios de tu mascota para mantenerlo saludable. Una disminución en la ingesta alimenticia significa que debes buscar atención médica.
No te alarmes si tu nuevo gatito no come ni bebe de inmediato. Asegúrate de tener comida y agua disponibles para él en todo momento en un lugar tranquilo y silencioso, y eventualmente comenzarán a comer y a beber. A veces, los gatos pequeños necesitan uno o dos días para comenzar a comer debido al estrés.
Cómo presentar al gatito la caja de arena
La caja de arena de tu gatito debe colocarse en un rincón apartado de su habitación y los lados deben ser lo suficientemente bajos para que pueda entrar. Cada vez que tu gatito haya terminado de comer o se haya despertado de una siesta, colócalo en la caja de arena.
Si no lo acepta de forma natural, cógelo suavemente por una pata y enséñele a cavar. Felicítalo si usa la caja de arena y nunca lo castigue si no lo hace. Usa arena común, no del tipo aglomerado porque los gatos cachorros pueden lamer y tragarse los grumos causando bloqueos en su tracto digestivo.
Cuando tu gatito tenga 3 meses, puedes usar la arena aglomerante de manera segura. Recuerda mantener limpia la caja de arena para animar a tu gatito a tener buenos hábitos con ella.
Tiempo de juego
El tiempo de juego es muy importante para las habilidades sociales y físicas de su gatito, forma parte de su desarrollo y de tu responsabilidad en el proceso de aprender cómo cuidar un gato cachorro. Trata de brindarle una interacción suave y abstenerte de juegos bruscos que puedan conducir a la agresión. Ofrece a su gatito pelotas de ping-pong rodantes, plumas colgantes o un juguete en el extremo de una caña. Tu gato cachorro puede incluso disfrutar de un juguete con puntero láser o juguetes controlados con mando a distancia.
A los gatos pequeños les gusta esconderse y retirarse a veces, lo que hace que las cajas de cartón y las bolsas de papel sean ideales. Considera comprarle a tu gatito un rascador hecho de alfombra o cartón para disuadirlo de usar los muebles o alfombras de la casa. Proporcionar el equipo y el entrenamiento adecuados a tu gatito ayudará a evitar muchos daños y frustraciones en el futuro.
Ten un hogar a prueba de gatos
Los gatitos son inteligentes y curiosos, lo que significa que sus dueños deben mantenerlos a salvo de cualquier daño. Asimismo, también debes mantener a salvo los objetos de tu hogar, todo un reto en el proceso de aprender cómo cuidar un gato cachorro.
Para que tu casa sea a prueba de gatos, comienza por colocar todas las plantas fuera de su alcance y asegúrate de que todos los gabinetes con artículos de limpieza del hogar estén cerrados con llave.
Envuelve los cables eléctricos con un organizador de cables y asegurándolos lejos del alcance de tu gato. Los artículos como bandas de goma, cuerdas, joyas, adornos navideños, bolsas de plástico, globos y otros artículos pequeños pueden ser peligrosos si se ingieren.
En el cuarto de lavado, mantén cerradas las puertas de la lavadora y la secadora para que tu gato no se suba para tomar una cómoda siesta. La tapa del asiento del inodoro debe mantenerse siempre hacia abajo para evitar que el gatito se ahogue o se envenene con agua potable que pueda contener productos químicos de limpieza.
Cómo cuidar un gato cachorro con éxito: la presentación a la familia
Evita manipular a tu gato durante los primeros días mientras se adapta, y presenta a un miembro de la familia a la vez. Los niños menores de cinco años no deben interactuar con los gatitos solos porque los niños pueden ser bruscos. A los niños mayores se les debe enseñar cómo sostener a un gatito bebé, con una mano justo detrás de las patas delanteras y con la otra sosteniendo sus cuartos traseros. Se les debe enseñar a no cogerlo nunca por la cola o las orejas, ni a levantarlo del pescuezo.
Si tienes otros gatos, asegúrate de que el veterinario los haya examinado y no tengan enfermedades. Mientras tu gatito está en su habitación, permite que tu otro gato olfatee alrededor de la puerta. Asegúrate de darle más atención a tu gato grande para aliviar su propia ansiedad por el nuevo gatito.
Una vez que tu gato cachorro se sienta cómodo, permite que los dos se reúnan, incrementando poco a poco la frecuencia. Permíteles olfatearse y explorarse entre sí mientras están supervisados. Los silbidos y gruñidos son normales, pero si algún gato muestra actitudes agresivas, sepáralos y vuelve a intentarlo en unos días.
Cómo presentar un gato bebé a mi perro
Si tienes un perro en tu casa, no lo dejes solo con el gato bebé. Asegúrate de que tu perro tenga correa cuando le presentes al gatito. Esto les permitirá aprender el olor del otro de una forma segura. Trata de evitar que el gatito se escape o pueda convertirse en un juego de persecución para el perro. Premia a tus mascotas por su comportamiento bueno y tranquilo.
Conclusiones para proceso de cómo cuidar un gato cachorro
En conclusión, tener un gato cachorro puede ser una experiencia divertida y emocionante, e interesante para conocer al nuevo miembro peludo de la familia. Si esta es tu primera experiencia con un gatito bebé, es posible que desees tomarte el tiempo para leer un libro sobre el cuidado de los gatos bebés que puede proporcionar muchos más detalles de los que ofrece este artículo. Recuerda buscar todas las herramientas que consideres importantes si deseas hacerte un experto en cómo cuidar un gato cachorro.